A medida que la pandemia de Covid-19 continúa evolucionando e impactando a los países, es vital que las organizaciones consigan mantener su compromiso con la Responsabilidad Social Empresarial (RSE). Si esto se hace correctamente, no solo beneficia a las comunidades y los colaboradores, sino también a las propias organizaciones.
De ahí la importancia de adaptar el rol de las empresas y este compromiso a la nueva realidad. La pandemia ha tenido graves consecuencias sanitarias, sociales, y económicas. En este difícil contexto, las empresas están llamadas más que nunca a incrementar y menos a disminuir sus actividades de RSE, con la finalidad de apoyar a la sociedad, y en particular a quienes son más vulnerables dentro de ella.
En Guatemala, a lo largo de toda la emergencia sanitaria, muchas empresas han procurado apoyar a la sociedad de distintas maneras, algunas lo han hecho a través de alianzas con organizaciones no gubernamentales (ONG), otras con iniciativas de impacto directo en las comunidades en las que desarrollan sus actividades, o adaptando la difusión de su trabajo a la nueva realidad.
Acercarse a la audiencia de manera virtual también es impulsar la RSE
Antes de la llegada del Covid-19, ya se hablaba de adaptar muchas de las actividades empresariales al mundo virtual. Dos años después, esta es una alternativa estándar para las compañías al compromiso cara a cara. Generar actividades virtuales tiene sentido, y además tiene el potencial de brindar beneficios adicionales a los usuarios de un servicio.
Para la Transportadora de Energía de Centroamérica dar a conocer su trabajo de manera virtual es la forma de que los usuarios conozcan y comprendan sin importar el tiempo y el lugar, cómo funciona el sector eléctrico del país, en particular el del transporte de electricidad.
El Camino de la Energía Virtual: manteniendo el compromiso en tiempos complejos
Con la conciencia de que un recorrido virtual ofrece confianza adicional en el negocio, ya que las personas pueden conocer el interior de una industria y ver cómo y dónde se trabaja, la Transportadora de Energía de Centroamérica lanzó en junio de 2020 su programa El Camino de la Energía Virtual, que consiste en una visita guiada por un especialista a una subestación a través de imágenes 360°.
El objetivo principal de esta iniciativa es ampliar el conocimiento del sector, además de resolver dudas de los participantes acerca del transporte de energía eléctrica utilizando herramientas digitales innovadoras. La mayoría de las personas naturalmente sienten más afinidad con los negocios que pueden ver, por lo que esta clase de iniciativas tienen el potencial de aumentar las reacciones y el compromiso con una marca.
Las actividades virtuales siguen siendo un fenómeno nuevo que debemos ayudar a evolucionar. En muchos casos, estos programas se están poniendo a prueba, lo que significa que los comentarios de la población podrían mejorar su ejecución en el futuro.Ya sea que los comentarios se refieran a la tecnología, la logística o la interacción, la gente desempeña un papel crucial para garantizar que los programas virtuales mejoren donde sea necesario.
También vale la pena pensar más allá de la tecnología para involucrar a las comunidades
Es importante recordar que, si bien actividades como El Camino de la Energía Virtual son apropiadas para algunas personas, podrían excluir a otras. Quizás una de las desigualdades sociales menos reportadas es la falta de inclusión digital. Son pocas las empresas que toman en cuenta esta realidad al evaluar sus iniciativas de RSE.
Para la Transportadora de Energía de Centroamérica cubrir ambos aspectos es esencial. Teniendo una amplia visión de las necesidades de las comunidades donde opera, la empresa ha tenido en cuenta que la falta de comprensión, y la falta de acceso a las nuevas tecnologías es un desafío para algunas personas de entornos socioeconómicos más bajos.
Por esa razón, y a pesar de encontrarnos en medio de una pandemia, la Transportadora de Energía de Centroamérica no cesó su compromiso social en ningún momento, y ha implementado varios Proyectos de Valor Compartido entre los que destacan:
- La construcción de una pileta comunitaria en Santa Lucía Milpas Altas: el pasado martes 28 de diciembre, y gracias a la colaboración con el Cocode de Santa Lucía Milpas Altas, Sacatepéquez, fue inaugurada la pileta en la aldea El Triunfo, en la que los habitantes de esa comunidad pueden lavar sus prendas sin necesidad de desplazarse largas distancias.
- Contribuir al acercamiento de la niñez al deporte en Jocotenango: en agosto de 2021, la empresa tuvo la oportunidad de aportar su energía a un grupo de más de 80 niños de distintas edades, dotándolos con uniformes deportivos y pelotas de fútbol en Jocotenango, Sacatepéquez.
- Ampliación de complejo educativo en San Juan Sacatepéquez: la empresa puso manos a la obra en la ampliación del complejo educativo Doris T. Allen, ubicado en la aldea Sajcavillá, por medio de la aportación de materiales de construcción para cuatro aulas totalmente nuevas.
La responsabilidad también cuenta a lo interno
Muchas grandes empresas en Guatemala hablan constantemente de sus valores o de cuánto se preocupan por sus empleados y otras partes interesadas. La crisis del coronavirus es el momento ideal para que cumplan con ese compromiso. La forma en que las grandes empresas sigan respondiendo a esta crisis es decisiva y se recordará durante décadas.
En ese sentido, por demostrar su compromiso responsable para salvaguardar la vida y la salud de sus colaboradores, contratistas y visitantes durante la pandemia, la Transportadora de Energía de Centroamérica recibió recientemente el reconocimiento “Empresa Libre de Covid RSE” por parte del Centro para la Acción de la Responsabilidad Social Empresarial en Guatemala con el apoyo de la Embajada de Canadá.
A pesar de la falta inicial de consistencia en las recomendaciones de políticas nacionales y subnacionales para guiar los lugares de trabajo sobre cómo prevenir la transmisión y proteger a los trabajadores del Covid-19, Transportadora de Energía de Centroamérica implementó sin dilación numerosas medidas de prevención y mitigación desde el inicio de la pandemia.
Estas y otras acciones separan y encumbran el ethos de la empresa, y la sitúan sin lugar a dudas en una posición especial en el ecosistema empresarial de Guatemala en lo que al relacionamiento con sus empleados y directivos respecta.